[Real Academia Nacional de Farmacia] El desarrollado sentido del olfato canino ha venido siendo aprovechado desde hace décadas por la humanidad. En el ámbito policial se los usa para la detección de drogas ilegales, explosivos y contaminantes químicos. En las tareas de rescate se los entrena para encontrar personas perdidas en montañas o enterradas en los escombros después de un terremoto. En el ámbito científico, perros han sido entrenados para hallar serpientes, huevos, pájaros, gusanos, hongos y hasta cierto tipo de bacterias. Pero hasta ahora, en ningún país se había usado para encontrar vinchucas. El trabajo de Nero fue un suceso. Un total de 70 vinchucas fueron recolectadas durante la investigación, de los cuales 22 eran de la especie Triatoma infestans vector principal de la enfermedad de Chagas en el Cono Sur, la misma especie que se captura dentro de los domicilios. Una ventaja adicional fue que los insectos fueron capturados vivos dentro de sus propios nichos, lo cual ayuda a orientar las futuras investigaciones y eventuales tareas de control.
El hábil can, ajeno a su innovador aporte a la lucha contra esta infección tropical, se contenta con los trozos de salchicha que su entrenador Eduardo Du Bois le da como recompensa por cada vinchuca detectada. El procedimiento resultó rápido, fácil y de bajo costo.