[SciDev.net] La atracción que los mosquitos sienten por otros miembros de su especie cuando depositan sus huevos se podría usar contra ellos para ayudar a controlar los brotes de fiebre del dengue, según un estudio realizado en el Perú. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda estrategias de control dirigidas a atacar los estados inmaduros del mosquito Aedes aegypti, vector del dengue, asumiendo que la eliminación de la mayor cantidad de recipientes de agua donde se depositan los huevos reduciría el número de mosquitos en una proporción similar.
Pero un estudio en el Perú ha encontrado que para depositar sus huevos las hembras de los mosquitos escogen aquellos lugares que ya están profusamente infestados. Si los recipientes son removidos o tratados con larvicidas, buscan otros lugares adecuados, reduciendo así la efectividad de las medidas de control.
La fiebre del dengue es una enfermedad potencialmente mortal causada por un virus y transmitida por mosquitos. Amenaza a las dos quintas partes de la población mundial, especialmente en los trópicos y subtrópicos, y su incidencia va en aumento de acuerdo con la OMS.
Encontraron que el factor clave que determina dónde poner los huevos es la presencia de gran cantidad de otros huevos y larvas.
En lugar de eliminar esos sitios altamente infestados, deberían ser tratados con reguladores de crecimiento de insectos (más conocidos como IGR por sus siglas en inglés), como el piriproxifen, que no solo matan a los huevos o larvas, sino a las pupas.
Esto crearía ‘estanques de huevos’ que atraerían a las hembras ponedoras del mosquito pero reduciría el número de adultos emergentes de esos lugares, según el estudio publicado en PLoS Neglected Tropical Diseases el mes pasado (12 de abril).
Con esta estrategia, “habría menos adultos”, dijo a SciDev.Net Jacklyn Wong, de la Universidad de California, en Davis, y autora principal de la investigación.
Por otro lado, los atrayentes químicos que las hembras usan para escoger los lugares de puesta de huevos podrían ser usados como señuelos para atraerlas a las trampas, dice el estudio.
Wong indicó que estos hallazgos podrían incluso mejorar las actuales técnicas de control. Por ejemplo, los reguladores de crecimiento se podrían combinar con una técnica que usa a los propios mosquitos para llevar insecticidas a sus sitios de reproducción.